Una receta apta para personas que no pueden comer harinas y para todos  los que nos gusta  ganar en salud y tomar un postre 100% vegano y no por eso menos rico.

Ingredientes :

Zanahoria rallada 150 gramos

Coco rallado 100 gramos

Dátiles 5

Jugo de limón 1 cucharada

Endulzante natural tipo estevia a gusto.

Cobertura:

Castañas de cajú remojadas 8 horas y escurridas 100 gramos

Agua 3 cucharadas

Extracto de vainilla  natural 1 cucharadita

Endulzante natural a gusto

Nueces para decorar a gusto.

Modo de preparación:

Procesar el coco rallado junto a la zanahoria rallada y los dátiles, añadir el jugo de limón y el endulzante. Nos debe quedar una pasta homogénea.

Yo utilicé un aro de emplatar como molde pero podés utilizar moldes de tartaletas o el molde que tengas.

Te aconsejo es que le pongas un pedazo de papel de horno o film transparente en la base para que te sea más fácil luego poder desmoldar y trasladar al plato donde lo vayas a servir.

Disponer el relleno en el molde deseado apretando bien el mismo para que quede bien compacto.  Llevar a la heladera como mínimo dos horas. El aceite propio del coco rallado solidificará y ayudará a que todos los ingredientes queden bien amalgamados.

Para la cobertura :

Procesar con minipimer las castañas previamente remojadas junto al agua, vainilla y el endulzante. Nos quedará una crema muy suave. Mezclar bien y reservar.

Pasado el tiempo de enfriado, desmoldar la tarta y cubrir con la cobertura y por último decorar con nueces molidas a gusto.